Ideada para conmemorar los diez años de la revolución, Octubre quizá sea la obra mayor de Eisenstein, aquélla en la que sus ideas vanguardistas sobre la organización del montaje cinematográfico se manifestaron en todas sus posibilidades creativas. Fue también una suerte de involuntario triunfo simbólico ya que, a falta de material rodado durante el verdadero octubre, en más de un documental aparece el film de Eisenstein ocupando su lugar. Aunque no es el único ejemplo posible, las escenas sobre Kerenski han pasado a la historia del cine como demostración del llamado “montaje intelectual”, que según el realizador implica pensar el montaje “como una colisión” en lugar de un simple vínculo entre las diferentes tomas. “De la colisión de dos factores dados, surge un concepto”.
Octubre (Oktiabr, 1928) c/Vasili Nikandrov, Vladimir Popov, Boris Livanov, Layaschenko, Chibisov. 110’ aprox.