Elli (Lisa Gastoni), una ninfómana madura casada con un profesor homosexual, es asaltada por tres personajes que parecen escapados de la película The Rocky Horror Picture Show, desnudada y vejada. Esto ocurre en los primeros cinco minutos de película, sin preámbulo ni explicación alguna. El resto no se queda atrás. Labios de azul sucio no es un giallo como sugiere su título (tomado de un poema de P. B. Shelley) sino un drama erótico extremadamente audaz y formalmente sofisticado, como sólo se hacían en los 70. Lo que más llama la atención es la combinación única de situaciones bizarras con una producción de primer nivel, en la que se destaca la dirección de fotografía del húngaro Gábor Pogány (desde Dos mujeres de Vittorio De Sica hasta Pink Floyd Live at Pompeii) y la música del prolífico Ennio Morricone. Extremadamente difícil de ver, ya que no ha sido editada en formatos hogareños, se exhibe una copia nueva en 35mm.
Labios de azul sucio (Labbra di lurido blu, Italia-1975) de Giulio Petroni, c/Lisa Gastoni, Corrado Pani, Jeremy Kemp, Hélène Chanel. 120’