El cine portugués ha conquistado un lugar destacado en el circuito de festivales internacionales, y muchos de sus autores son reconocidos tanto por la crítica como por el público, que sigue su obra con expectativa ante cada nuevo estreno. Sin embargo, dar cuenta de la diversidad y amplitud de esta cinematografía es una tarea compleja. La Semana de Cine Portugués se propone como un espacio de reencuentro con directores consagrados, cuyas filmografías han formado parte de ediciones anteriores, pero también como una invitación al descubrimiento. En ella conviven las propuestas de realizadores jóvenes, emergentes o con poca visibilidad, quienes completan el mapa de un cine en expansión, multifacético y de una vitalidad notable.
En esta edición de la Semana de Cine Portugués, la sección Panorama da cuenta de esta búsqueda con películas como el díptico de João Canijo, compuesto por Mal Viver y Viver Mal, que fue parte de la última edición del Festival de Cine de Berlín, donde se llevó el premio a mejor película en la competencia internacional. Incluye también dos óperas primas –Estamos no ar, de Diogo Costa Amarante, una comedia peculiar y disruptiva de voces que callan, y Fogo do Vento, de Marta Mateus–, que significan el salto al largometraje de dos realizadores muy diferentes pero que ya en sus cortometrajes habían demostrado ser voces sumamente singulares. Mateus estará además presente en la apertura. La sección se completa con O Palácio de Cidadãos, de Rui Pires, un documental observacional tan afilado como urgente que registra la actividad dentro del Poder Legislativo portugués y tiene como temas centrales la salud y la habitación. Como cierre de esta edición, tendremos también como invitado a Paulo Carneiro, presentando su última película, A Savana e a Montanha, un cruce entre western e historia de resistencia del pueblo de Covas do Barroso contra el proyecto de una mina de litio, la mayor a cielo abierto en Europa, llevado a cabo por un gigante multinacional.
Priorizando un cine hecho por autores y autoras, la conciencia política, la búsqueda personal y –sobre todo– una premura en contar historias, incorporamos la sesión Cortometrajes. Un programa compuesto por cuatro películas que tienen en común personajes femeninos, o la misma idea de lo femenino, como elemento medular. Kora, de Cláudia Varejão, remite a una historia de la mitología griega sobre una mujer que dibuja en la pared el perfil de la sombra del hombre que ama, en vísperas de su partida para la guerra. La directora reúne testimonios de refugiados que relatan sus historias a través de retratos, lejos de su tierra. Catarina Vasconcelos, en Nocturno para uma Floresta, rescata en este bello ensayo visual la historia de un grupo de monjes del siglo XV que construyó un muro alrededor de un bosque para impedir la entrada de mujeres. Rita M. Pestana, reconocida por su trabajo como montajista, debuta como directora con Rinha, un cortometraje sobre decisiones que cambian nuestra vida para siempre. Por último, As Filhas do Fogo, de Pedro Costa, con su pantalla dividida en tres, parece insinuar nuevos caminos en la filmografía de este autor. Tres mujeres entonan la misma canción, sobre nosotros y nosotras, un lamento sobre la crueldad del capitalismo.
El foco Poscolonialismo presenta un trío de obras que indagan las secuelas del período colonial portugués en el presente. Sempre, un documental realizado con la mirada aguda de Luciana Fina a partir del acervo de la Cinemateca Portuguesa repasa la Revolución de los Claveles, sus implicancias inmediatas y sus bemoles. En Banzo, Margarida Cardoso vuelve a centrar su trabajo en tratar de comprender el pasado colonial portugués: a través de los ojos de un médico, conocemos el extraño mal que afecta a los trabajadores esclavizados en una isla africana a principios del siglo XX. Finalmente, O Ouro e o Mundo, de Ico Costa, con su mirada punzante, aborda la precarización laboral en África, pero explora sus manifestaciones contemporáneas desde la mirada de una joven pareja en una pequeña ciudad de Mozambique.
Este año, la programación suma un foco que nace del compromiso por expandir siempre el universo de historias narradas y el público que pueda descubrirlas. Filminhos: cine para toda la familia es un programa de cinco cortometrajes de animación pensados para ser disfrutados por todas las edades, que refleja el momento de explosión creativa que atraviesa este campo.
Producida y programada por VAIVEM, con el apoyo del Camões IP y la Embajada de Portugal en Buenos Aires.
JUEVES 1
17:00 Sesión de apertura: Fogo do Vento (72’) + Farpões Baldios (25'), de Marta Mateus. Con la presencia de la directora, sesión presentada por Roger Koza.
19:00 Sempre (108’), de Luciana Fina.
VIERNES 2
18:00 Cortometrajes: Kora (29’), de Cláudia Varejão + Nocturno para uma Floresta (16’), de Catarina Vasconcelos + As Filhas do Fogo (9’), de Pedro Costa + Rinha (22’), Rita M. Pestana.
20:00 Banzo (127’), de Margarida Cardoso.
22:30 Mal Viver (127’), de João Canijo.
SÁBADO 3
18:00 O Palácio de Cidadãos (132’), de Rui Pires.
20:30 O Ouro e o Mundo (104’), de Ico Costa.
22:30 Viver Mal (124’), de João Canijo.
DOMINGO 4
17:00 Filminhos: cine para toda la familia: Ice Merchants (14’), de João Gonzalez + O Homem das Pernas Altas (9’), de Vitor Hugo Rocha + T-Zero (11’), de Vicente Nirō + Percebes (12’), de Alexandra Ramires y Laura Gonçalves + A Menina com os Olhos Ocupados (8’), de André Carrilho. Sesión presentada por Nicolás Zukerfeld.
18:00 A Savana e a Montanha (74’), de Paulo Carneiro. Con la presencia del director.
20:30 Estamos no Ar (90’), de Diogo Costa Amarante.