Con ayuda de un grupo de intérpretes tan notable como idiosincrático, Aldrich narró la historia de una estrella (Palance) que no puede librarse de su productor (Steiger) porque éste le ha evitado la cárcel en el pasado y ahora está dispuesto a cobrarse esa deuda.
No hubo delirio interpretativo que no se aplicara a este elegantísimo juego de ingenio y romanticismo cool cuando se estrenó. El tiempo ha seguido pasando, y hoy puede verse casi como un video-juego de género (el Film Intelectual), ejecutado con maestría por Resnais.
Los recuerdos de Molina de sus películas se fijan, de a poco, en el cuerpo casi como una prótesis para la identidad, y en ese proceso el cuerpo y las relaciones que de él dependen se transforman en una interfaz maleable de pura potencialidad e imaginación
Tres personajes y un barquito es todo lo que necesitó Polanski para hacer una obra maestra en su primer largometraje, luego de anticipar su talento en films cortos como el multipremiado Dos hombres y un ropero.
La trama apenas disimula una violenta serie de ataques a la religión, a la sociedad organizada, a la autoridad y hasta al concepto de propiedad privada. Debió haber sido el film que permitiera el regreso de Buñuel a España, pero en cambio quedó prohibido en ese país hasta la muerte de Franco.
Perros de la calle marcó el debut de Tarantino como director, e inmediatamente se convirtió en símbolo de una nueva manera de entender el cine, donde el discurso elíptico y fragmentario marca el comienzo de una época.
“Nada está bien. Nunca lo estuvo, ni nunca lo estará. Mientras no estemos fuera”. Manifiesta Joe Collins a sus compañeros de celda. La acción de Entre rejas transcurre en la penitenciaría Westgate, donde los reclusos viven hacinados y son torturados por los guardas.
El enigma… es una película tremendamente hawksiana, con ese grupo de personajes atrapado en una base del Polo Norte tratando de derrotar (o investigar, dependiendo de quién se trate) a una criatura extraterrestre que encontraron bajo el hielo.
Stew Smith es un periodista que se caracteriza por su notable lucidez y sarcasmo. Absolutamente abstraído en su trabajo, es enviado por su jefe a la mansión de los Schuyler para ratificar cierta historia relacionada con Michael, el hijo de la familia.
Un avión cae en medio del desierto del Sahara y, para sobrevivir, sus pasajeros deciden construir otro, con sus restos. Si algo tienen en común las películas de Aldrich es que sus protagonistas masculinos se quiebran emocionalmente y luego tardan bastante tiempo en recuperarse, si es que lo logran.
Perros de paja
Con suma habilidad, Peckinpah ha graduado esta historia, desde el festivo anecdotario inicial y los remansos de paz, hasta la poderosa media hora final, que no sólo alberga cinco muertos sino también un brío frenético de acción, comentada ásperamente por una partitura de gaitas escocesas.
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