El nuevo museo se propone como un “puente” que permita integrar a comunidades y barrios carenciados de la Ciudad y unir públicos diversos. Además de ser un centro de arte contemporáneo siglo XXI, con proyectos de gran escala y prestigio internacional.
En el marco de la celebración por el 15 aniversario del museo, Eduardo F. Costantini -presidente de la Fundación Malba- anunció el firme propósito de fundar una nueva sede del museo, cercano edificio actual (al este de la traza del ferrocarril Belgrano), impulsado por el deseo de integrar a una parte de la sociedad con menores recursos.
El nuevo museo será concebido como una institución “puente”, con fuerte sensibilidad social que, además de ser un museo de arte contemporáneo del siglo XXI –con proyectos de gran escala, complementarios del Malba actual-, pueda desplegar una serie de programas sociales, educativos y culturales diseñados para atender principalmente a las necesidades e intereses de los barrios Saldías, 31 y 31bis.
“El Malba actual se sitúa en Palermo Chico y tendríamos la oportunidad de romper el “cerco” creando una segunda institución del otro lado de las vías, que genere un espacio público, inclusivo y accesible para todos los vecinos”, afirma Eduardo Costantini. “Este nuevo Malba busca ser nexo en varios sentidos: norte/sur y este/oeste desarrollando una acción a distintos niveles, integrando a comunidades y públicos diversos, donde todos reconozcan al museo como propio y se desarrollen a través de su propuesta”, agrega.
Motivados por este proyecto y con el objetivo de reafirmar el compromiso filantrópico de la Fundación Malba con la cultura y el arte, se solicitó a la Administración de Bienes del Estado (AABE) la cesión del uso de un predio acorde al funcionamiento de una institución de estas características. El pedido fue bien recibido y dará lugar al llamado de una licitación pública para la evaluación de proyectos.
Malba se fundó en septiembre de 2001 con la visión de unir, educar y resaltar nuestra identidad latinoamericana. Hoy, quince años después, el museo ha logrado posicionarse como un referente nacional e internacional. A través de sus exposiciones y programas culturales, Malba acercó a nuevos públicos que nunca antes habían visitado un museo, haciendo también más accesible un barrio que hasta entonces estaba reservado para una minoría.
Hoy con más del 30% de la población viviendo por debajo de la línea de pobreza, el desafío es aún mayor. A través de la articulación público/privada y la cultura como agente de transformación social, la misión es pensar y proyectar una ciudad más equitativa e inclusiva “Este nuevo proyecto requiere un nivel de compromiso, involucramiento, constancia y consistencia a través de muchos años, que vamos a asumir conscientes de la responsabilidad social que implica”, concluye Costantini.