Figura central de la fotografía contemporánea, Candida Höfer es una de las artistas más representativas de la Escuela de Düsseldorf, también llamada Nueva Escuela de Fotografía Alemana, donde se incluyen a otros nombres fundamentales como Andreas Gursky, Axel Hütte, Thomas Ruff y Thomas Struth, todos discípulos de Bernd y Hilla Becher a fines de los años 70.
Höfer es reconocida por sus fotografías de espacios deshabitados, a los que se aproxima con una mirada analítica. Se trata, en su gran mayoría, de edificios públicos como bibliotecas y museos. A finales de los años 90, Höfer empezó a utilizar el gran formato, con el que consiguió imprimir mayor fuerza a sus imágenes. En sus fotografías prima el orden y la estructura del espacio, revelados a través de la luz ambiental.
Candida Höfer es la invitada de honor en la próxima edición de BAphoto y forma parte del programa de artistas invitadas que la feria lleva a cabo desde hace 4 años, con el objetivo de potenciar diálogos con el panorama internacional y establecer una representación más equitativa de género en el ámbito de la fotografía. Su participación en BAphoto es posible gracias a la Galería Thomas Zander y el apoyo de Aeropuertos 2000 en el traslado de las obras.
Entrada libre y gratuita con capacidad limitada.
Las entradas se retiran una hora antes en la recepción del museo.
Se entregará una entrada por persona.
La conferencia será en inglés, con interpretación simultánea.
Actividad organizada por BAphoto, Malba y Goethe-Institut.
Entre 1973 a 1982, Höfer se formó en la Kunstakademie Düsseldorf primero estudiando cine, con Ole John y luego, incorporándose a la primera clase de fotografía de Bernd Becher en la academia. También en Düsseldorf, en 1975, tuvo su primera exposición individual en la Galería Konrad Fischer.
Uno de los primeros grandes proyectos de Höfer fue Türken in Deutschland (Turcos en Alemania), donde retrató la vida de los migrantes turcos en su ciudad, Colonia, y los cambios en la fisonomía urbana a partir de su llegada. Este tema despertó el interés en el impacto del ambiente construido en la gente. Fotografió espacios públicos y semipúblicos, que iban desde estaciones de ferrocarril, spas, bibliotecas, museos a jardines zoológicos, desde bancos a casas de ópera. Algunos de estos lugares, iconos culturales monumentales, otros, arquitecturas cotidianas que pasan más desapercibidos en la ciudad. Dejó ver con sus fotografías que algo paradójicamente está presente cuando la gente no está en la imagen.
Sus fotografías investigan las formas y estructuras de los espacios, así como detalles que la integran. Examina las contradicciones entre la intención y el uso real, así como las capas del cambio histórico. Este acercamiento le permite un retrato muy personal de los espacios. Sus imágenes nos invitan a tomar tiempo para descubrir y reflexionar sobre qué hacen los espacios con nosotros y qué hacemos nosotros con ellos.
En sus trabajos recientes más abstractos, Candida Höfer se centra en la importancia de los detalles y su papel en la percepción estética del espacio.
Para la presentación de su trabajo no sólo utiliza la fotografía tradicional en tamaños variables ajustados a las exigencias de la composición, sino que también muestra su trabajo en proyecciones, recordando su participación temprana en el cine y su apreciación de las secuencias de imágenes, un enfoque que también retoma en sus publicaciones.
La obra de Candida Höfer se muestra en museos como el Kunsthalle de Basilea, el Kunsthalle de Berna, el Portikus, Fráncfort del Meno, el Museo de Arte Moderno de Nueva York, la Central Eléctrica de Toronto, el Kunsthaus Bregenz y el Museo Ludwig de Colonia. En 2013, el artista tuvo una exposición individual en el Museo Kunstpalast Düsseldorf. En 2002, participó en la documenta 11. Y en 2003, representó a Alemania en la Bienal de Venecia (junto con el difunto Martín Kippenberg).