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Jornadas Antropofagia Revisitada
Lunes 14, miércoles 16 y jueves 17 de febrero

A lo largo de tres días de eventos, se rindió homenaje a la Semana del Arte Moderno de Brasil, también conocida como Semana del 22, a cien años de su realización. Un momento clave en la historia del arte y la literatura brasileña que funcionó como catalizador para la irrupción de la modernidad artística en la ciudad de San Pablo.

El lunes 14 tuvieron lugar cuatro actividades. En la presentación Las mujeres en la semana del 22 y después, la investigadora Regina Teixeira de Barros realizó un exhaustivo repaso de las contribuciones de las artistas mujeres que fueron protagonistas de las primeras vanguardias brasileñas. Además de los nombres más reconocidos –Anita Malfatti y Tarsila do Amaral– destacó especialmente los aportes de la pintora Zina Aita, participante de la exposición de la Semana de Arte Moderno; de Regina Gomide Graz especialista en artes aplicadas, fuertemente influenciada por el arte textil indígena; y de Mina Klabin Wachavchik, responsable de los primeros proyectos paisajísticos con especies vegetales nativas del Brasil. En la conversación Antropofagia: lecturas desde el arte contemporáneo, Beatriz Lemos y Santiago García Navarro dialogaron sobre el devenir contemporáneo de las ideas que rodearon a la Semana de Arte Moderno. Lemos problematizó el tipo de recepción que se realizó históricamente de la Semana, y el modo en que se ignoraron algunas manifestaciones populares de la época, como la aparición del samba. Presentó además los lineamientos generales de la exposición Nakoada (Museo de Arte Moderno de Río de Janeiro, 2022), que se propone pensar una producción artística comprometida con algunos de los ideales modernos, pero sin caer en sus “trampas”. García Navarro, por su parte, reconstruyó la trayectoria artística de Lygia Clark, sosteniendo que hay una intención antropofágica que atraviesa toda su carrera. En el encuentro performático “Café Tarsila”, la artista Ivana Vollaro realizó una intervención en el bar del museo. A modo de homenaje a Tarsila do Amaral, Vollaro invitó a actualizar el concepto de antropofagia desde la palabra y el alimento como formas de conocimiento. En una ronda de café, entre colores marrones y rojizos del pau-brasil, propuso una conversación alrededor de la poesía y los manifiestos del movimiento antropofágico. Finalmente, la Comparsa Drag realizó en la explanada del museo un corso irregular con evocaciones a la figura de Flávio de Carvalho, artista brasileño célebre por sus intervenciones y su trastocamiento de los códigos de la vestimenta masculina.

La jornada del miércoles 16 comenzó con la mesa redonda La misma historia, otra historia”, con la participación de las investigadoras Lilia Moritz Schwarcz, Beatriz Azevedo y Marília Librandi. Moritz Schwarcz recuperó el legado de la revista Floreal y del escritor Lima Barreto, contemporáneo al movimiento que se inició en 1922, quien incluyó la realidad de las comunidades negras en sus obras, con una actitud totalmente distinta a la de las vanguardias de San Pablo que preferían hablar de “los otros”. Azevedo habló sobre el movimiento antropofágico en cuanto creación nutrida por la fuerte presencia femenina de artistas como Tarsila do Amaral y Patricia Galvão. Releyó además la crítica al mesianismo patriarcal en la obra de Oswald de Andrade y la articuló con ideas de pensadores contemporáneos como la ecofeminista Vardana Shiva y el filósofo Paul B. Preciado. Librandi, por su parte, presentó la obra del pintor Jaider Esbell, principal impulsor del Arte Indígena Contemporáneo, que se ha convertido en la última década en un movimiento que revaloriza y re-antropofagiza al movimiento modernista brasileño. A su vez, en la terraza del museo, se presentó la novela Macunaíma, el héroe sin ningún carácter de Mário de Andrade (1893-1945), joya fundante de la literatura brasileña moderna, traducida al español por Julieta Benedetto y publicada por Editorial Mansalva. Durante la presentación, Benedetto destacó la relación del poeta y narrador Mário de Andrade con Argentina: su amistad con Emilio Pettoruti, Oliverio Girondo, Norah Borges y Ricardo Güiraldes. Contó que en 1928, año en que se publicó la novela, su autor presentó en la revista Antropofagia un capítulo de la obra ilustrado por María Clemencia Pombo, artista y grabadora argentina. Participó también del evento Gonzalo Aguilar, especialista en literatura brasileña, que acompañó el proceso de traducción y compartió su mirada sobre la publicación de la novela en diálogo con la Semana del 22, haciendo foco en la herencia y en los modos de reactualizar, revisar y discutir este evento fundamental que marcó al siglo XX brasileño. La actividad concluyó con una serie de lecturas a cargo de Sofía Palomino y Francisco Garamona. En la conferencia “Antropofagia revisitada en clave afroargentina”, Federico Pita, miembro de la Diáspora Africana de la Argentina (DIAFAR) propuso una reflexión en torno a la representación de las negritudes. A partir de la obra de Emiliano di Cavalcanti y sus contemporáneos, planteó una perspectiva afrodiaspórica para profundizar en algunos aspectos políticos y étnico-raciales de las representaciones culturales.

Como cierre de las jornadas, el jueves 17 se proyectaron dos clásicos del cine brasileño en el Auditorio del museo. Vidas secas (1963), de Nelson Pereira dos Santos, narra la historia de una familia en el sertão de los años cuarenta. Realizado en una época de gran agitación política y social, en vísperas del golpe de estado que iba a instaurar la dictadura militar en Brasil, es uno de los títulos más destacados del cine latinoamericano. Tierra en trance (1967), de Glauber Rocha, muestra el delirio del poder y la demagogia de la política en un fresco delirante, metafórico, de la realidad brasileña. Es una una película filmada en gran parte con cámara en mano, en la que según su propio director, “todos los planos son feos porque trata sobre personas perjudiciales y sobre un paisaje podrido, de un falso barroco". 

Las Jornadas Antopofagia Revisitada fueron organizadas con el apoyo de la Embajada de Brasil en la Argentina.