El arrabal en cuestión es el Bowery neoyorquino en la década de 1890, el sitio ideal para beber, cantar, jugar y buscar mujeres fáciles, que Walsh evoca con su característico cóctel de salvajismo e inocencia. Sólo la primera secuencia, un montaje descriptivo de la vida cotidiana en el arrabal, viola en pocos segundos buena parte de los artículos de Código de Producción y varios preceptos tácitos de la actual Corrección Política.
El arrabal (The Bowery, EUA-1933) de Raoul Walsh, c/Wallace Beery, George Raft, Jackie Cooper, Fay Wray, Pert Kelton, Herman Bing, Oscar Apfel. 92’.