La pintora y artista audiovisual Narcisa Hirsch, pionera del cine experimental, dialogará con Susana Balán, destacada psicoanalista argentina con quien Hirsch desarrolló los míticos talleres de la mujer, de donde surgió el film Mujeres, y con Rocio Pichon-Rivière, doctora en literatura y nieta del destacado integrante de la APA y precursor del psicoanálisis argentino. Juntas reflexionarán sobre el contexto de creación del arte de los años 60, influido en Argentina por el incipiente desarrollo de la práctica psicoanalítica.
La actividad es gratuita y se podrá ver a través de la plataforma Zoom (con inscripción) y del canal de YouTube de Malba (sin inscripción).
Susana Balán es Licenciada en Psicología de la Universidad Nacional de Buenos Aires. Se graduó en 1963, cuando la carrera recién comenzaba su ahora reconocida trayectoria. Más tarde ingresó al Instituto Argentino de Estudios Sociales, fundado y dirigido por el Dr. Enrique Pichon-Rivière. De él aprendió, entre tantas otras cosas, la técnica de entrevistas para investigaciones en Opinión Pública, a la que recurrió frecuentemente, tanto para su trabajo clínico como para el desarrollo de sus teorías. En los años 70, Susana emigró a Brasil, e hizo de Río de Janeiro no solo su nuevo lugar de residencia sino también un nuevo punto de anclaje desde donde mirar el mundo. Allí continuó su desarrollo teórico en el que sería su primer libro: Tres estilos de mulher. Su camino, como sus ideas, siguieron en movimiento. Regresó a Buenos Aires, donde escribió La utopía amorosa, y más tarde, en 1998, se instaló en Nueva York, donde continuó con su trabajo en psicología clínica mientras seguía escribiendo. Sus ideas quedaron plasmadas en su libro Caminos y, más recientemente, en Link y las estrellas fugaces, donde explora un híbrido entre el cuento y el análisis de la personalidad.
Narcisa Hirsch nació en Berlín en 1928. En sus comienzos fue pintora y dibujante, y sus obras fueron expuestas en la Galería Lirolay, la galería de vanguardia más importante de Buenos Aires en los años 60. Allí las vio Jorge Romero Brest, el crítico de arte más influyente de aquel momento, que había decretado la muerte de la pintura tradicional de caballete. Desde entonces Hirsch se vio inspirada por las nuevas corrientes artísticas que surgían -las performances, el Living Theater y eventos que tenían lugar en sitios no tradicionales- y comenzó a realizar happenings como Manzanas, Bebés y, en 1967, La Marabunta. Con la documentación en fílmico de La Marabunta, la artista empezó a filmar. Desde el inicio su cine fue experimental, un fenómeno que tenía sus antecedentes en los años 30, con figuras como Buñuel y Dalí en España, o Hans Richter y muchos otros en la “Bauhaus”, en Alemania. Amputado por la segunda guerra mundial, este cine recobró potencia en los años 50 y 60 en Estados Unidos, y sobre todo en Nueva York, bajo la batuta de Jonas Mekas, su gurú principal. En los últimos años, Hirsch comenzó a trabajar en formato digital, y realizó películas como Inscripciones, Kosmos, Kosmos, la incertidumbre (junto a Rubén Guzmán y Robert Cahen) y Myst.
Rocío Pichon-Rivière se licenció en filosofía en la Universidad de Buenos Aires, es doctora en literatura de la Universidad de Nueva York y se desempeña como profesora de literatura latinoamericana en la Universidad de California, Riverside. Ha publicado artículos en revistas académicas como Res Pública: Revista de Historia de las ideas políticas, Postmodern Culture y GLQ: A Journal of Gay and Lesbian Studies. Actualmente está trabajando en un libro titulado: La piel de la política: Observaciones transfeministas sobre la diferencia, basado en su tesis doctoral.
19.03— 16.08.21
Terapia
La exposición Terapia, toma como punto de partida la influencia del discurso y las prácticas terapéuticas del campo psicoanalítico en la cultura argentina.
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