1985, Buenos Aires, Argentina. El juicio a las juntas militares de la última dictadura (1976/83), acusados por delitos contra la Humanidad. Durante 90 jornadas se escucharon los relatos del horror y una sentencia final: Nunca Más.
Un actor que estaba exiliado en razón del gobierno dictatorial, regresa a su país en la época de la Guerra de las Malvinas y se reencuentra con sus amigos.
Jerónimo tiene 20 años y está medicado con psicofármacos. Su padre piensa que unos días en un entorno natural pueden curarlo y decide llevarlo a una casa perdida en la montaña.
Obra inédita por razones arcanas, luego conocida en tardes televisivas aptas para la nostalgia del té con masitas, este film merece ser reconducido a otra senda de interpretación. Antes de que el realismo mágico arrasara con la diégesis rural hubo un estilo como el de Marco Cerretani –autor de la novela– que era el del brutalismo trágico.
Basada en un argumento de Norma Aleandro, esta fue la única experiencia cinematográfica de David Stivel, uno de pocos artistas influyentes que dio la televisión argentina. El film destaca por el trabajo de todo su elenco, que resulta beneficiado por la decisión de utilizar sonido directo y por la realización de Stivel, que se demostró capaz de sortear las limitaciones del lenguaje televisivo.
El film es retorcido y piadoso, lo cual no implica que excluya una adecuada dosis de ironía cuando es preciso. De los menos frecuentados de su autor, merece pasar al frente como los valientes y los buenos estudiantes.
El Negro obliga a su esposa Mabel a ejercer la prostitución. Los dos guardan en secreto un asesinato. Todo se descontrolará cuando él contrate a una mujer para que trabaje y viva con ellos.
Maria del Carmen, una ama de casa de 50 años de suburbio descubre que tiene un don: armar rompecabezas. En el camino conoce a Roberto, un millonario de 60 años que aspira a participar en el torneo mundial de rompecabezas de Alemania. Juntos logran formar una pareja imbatible de juego.
En los años 30, los obreros de un frigorífico fundan un sindicato y se rebelan contra el maltrato de su patrón, que los explota sin contemplaciones.
Si los filmes se midieran en términos de risas por minuto habría que decir que Mercano es una de las películas más divertidas que dio el cine argentino en mucho tiempo.
Colección
Artistas indígenas contemporáneos: Miradas decoloniales sobre el circuito artístico
Adoptar una perspectiva crítica decolonial para acercarnos a la cuestión del arte indígena contemporáneo supone partir de la idea de que en el circuito artístico latinoamericano tal cuestión no puede reducirse tan solo a subsanar la “ausencia” o sub-representación de las expresiones estéticas de determinados grupos étnicos.
13.04.2023