Durante mayo, se estrena Viaje a los pueblos fumigados de Pino Solanas, y Malambo, el hombre bueno, de Santiago Loza.
Para su exposición individual en la Galerie Yvon Lambert de París, Lamelas pensó en repetir la estructura de tríptico que había utilizado en su serie Time as Activity, como punto de partida de su estudio de la metrópolis pos mayo del 68.
Situación de tiempo evidencia que el “medio es el mensaje”. Por su carácter autorreferencial y enfasis en el soporte, esta obra es señalada como antecedente del video arte en la Argentina.
Cuando volvió a vivir en Los Ángeles, en 1976, Lamelas se sentía aislado porque muchos de los colegas a quienes conocía vivían lejos de su casa. Así que empezó a invitarlos a su estudio de Sunset Boulevard, para que posaran durante una hora y él pudiera hacerles un retrato dibujado.
Este texto forma parte de Me lo llevaré a la sepultura, una colección de historias que responde a una convocatoria a escritores de diversas generaciones realizada en el marco de la exhibición Memorias imborrables.
Disney, con su fino olfato para encontrar a los mejores artistas, contó en los años 40 con Dalí para la preparación de una película que no vería la luz hasta mucho más tarde, Destino (2003). Desde entonces, grandes compañías extranjeras han contratado a artistas y profesionales españoles para distintas áreas de la animación.
Francisco Macián (Barcelona, 1929-1976) es uno de los nombres clave de la animación en España. Montó su propio estudio en Barcelona en 1955, desde el que realizó publicidad para los Estudios Moro y, más adelante, su primer largometraje.
Gracias a la tecnología y a una creciente industria, hacer animación ya no es la odisea que solía ser. A partir de los 90 el número de realizadores se multiplica exponencialmente y cada vez es más difícil atribuir una nacionalidad a una película.
Una gran parte de la animación española, sobre todo la anterior a los años 50, fue experimental, ya que funcionaba bajo el principio de prueba y error. Pero esta sesión recoge otras experimentaciones, las de ámbito artístico.
El milagro económico llega a España a finales de los 50 tras dos décadas de prolongada y autárquica posguerra. Con el desarrollo industrial y la expansión de la clase media, la publicidad florece y encuentra en la animación un atractivo lenguaje con el que seducir a los nuevos consumidores.
El régimen franquista vio en el cine un aliado para difundir sus valores. En una España devastada por la Guerra Civil, el régimen apoyó la producción de Garbancito de la Mancha, que habría de ser el primer largometraje animado en color europeo.
Programación mayo 2018
Durante mayo, Pensar Pessoa y Formas de leer Proust 3 en Malba Literatura.
05.05.2018