Segunda colaboración entre Bigelow y el guionista (y ocasional director) Eric Red. La primera dio como resultado Near Dark (1987), un western protagonizado por vampiros, muestra acabada del talento de Bigelow como directora. Esta vez el género es el policial y su protagonista –extrañamente, dentro de la obra de Bigelow, siempre interesada en universos masculinos- es una mujer. J. L. Curtis es una policía recién recibida, acosada por un asesino obsesionado con ella. El talento visual de Bigelow transforma esta repetida historia en un gran thriller. “Poeta significa revólver”, se escucha decir en una película clásica del cine moderno. Explicar por qué Bigelow es poeta excede el espacio de esta reseña, y para eso están sus películas.
Testigo fatal (Blue Steel, EUA-1990) de Kathryn Bigelow, c/Jamie Lee Curtis, Ron Silver, Clancy Brown, Elizabeth Peña. 102’.