Griffith invirtió en Intolerancia la inmensa fortuna que había obtenido gracias al éxito de El nacimiento de una nación (1915). También decidió llevar a un inédito nivel experimental las técnicas narrativas que perfeccionaba desde 1908 y que deben contarse entre las más influyentes de la historia del cine. Esta vez decidió relatar cuatro historias paralelas, alternando escenas de una a otra, sobre el tema común de la intolerancia a través de los siglos. Pese a la audacia creativa del resultado, el público no volvió a acompañarlo y Griffith tardó varios años en recuperarse del golpe, aunque el tiempo le dio la razón y los historiadores lo consideran su mejor film.
Intolerancia (Intolerance, EUA-1916) de David Wark Griffith, c/Robert Harron, Mae Marsh, Constance Talmadge, Alfred Paget, Seena Owen, Bessie Love, Eugene Pallette. 140’.