Manifestación (1934)
de Antonio Berni
por Manuel Aja Espil
Manuel Aja Espil (Buenos Aires, 1987) elige hablar de la obra Manifestación de Antonio Berni a partir de los materiales que el artista rosarino utiliza, considerándolos un contenido simbólico de la pintura figurativa argentina. Aja Espil pone a la obra en contexto y ahonda en su espíritu experimental, en su composición cinematográfica y en la idea de mural transportable.
Argentina, 1905–1981
Manifestación, 1934
Temple sobre arpillera
180 x 249,5 cm
En Manifestación, Berni dispone figuras en poderosos primeros planos que se suceden hacia el fondo conformando un mar de cabezas; sin embargo, no se trata de una masa indiferenciada, ya que cada componente del conjunto –que experimenta una situación de huelga y ha acudido a una concentración portando carteles– exhibe rasgos y actitudes que lo tornan singular. Un variado grupo cuyos extremos son las figuras pensativas con la mirada perdida y las que expresan rebeldía: se trata de la melancolía y la rabia,1 dos sentimientos representativos de los convulsionados años de entreguerras que caracterizan, respectivamente, al pensador ensimismado y constructivo y al militante radicalizado y batallador.