La estructura del Festival para esta edición de 2020 –que cuenta con más de 50 títulos entre largos y cortometrajes– fue diseñada en versión online y gratuita, no solo por la pandemia del Covid-19 sino también como un modo de ampliar la llegada, desde lo cultural y lo geográfico de la propuesta de Asterisco, y así poder abarcar tanto otros territorios como otras formas de circulación y transmisión de cine LGBTIQ+.
El Festival siempre tuvo como objetivo garantizar que el acceso a las funciones se restrinja lo menos posible por el poder adquisitivo, que la inclusión sea lo más completa que se pueda, proponiendo muchas funciones gratuitas o a muy bajo costo en todas las ediciones de Asterisco. Incluso en varias ediciones hubo funciones de cine al aire libre con música en vivo, o un cine en otros espacios fuera de las salas convencionales.
Primero yo (Argentina, 1964) de Fernando Ayala
“Hay que ser hombre” es el imperativo que pesa sobre el joven Jacky (Ricardo Areco), que acaba de volver de Europa con el intenso deseo de ser crítico de ballet. Quien ejerce ese mandato es su padre, Juanjo Arrieta (Alberto de Mendoza), un célebre deportista y playboy, acostumbrado a destacarse en todas las justas viriles. Ayala fue, con Torre Nilsson, uno de los precursores de la llamada Generación del 60 y este es el film que más cerca está de la sensibilidad de esos cineastas renovadores. Funciona en varios niveles: en parte documenta una época de la alta burguesía argentina, con sus modas, consumos, deportes y fiestas (En una escena filmada en el legendario Edelweiss hacen cameos varias figuras del cine argentino, como Elsa Daniel, María Vaner, Duilio Marzio y Rodolfo Kuhn.) En parte es también una crónica indirecta del ambiente queer de clase alta, sobre todo en su descripción del entorno de un personaje llamado Adolfo, que está lleno de sobreentendidos. Más centralmente es una radiografía feroz del machismo argentino y su concepción utilitaria de las mujeres, que desde el principio se definen como un bien de cambio. Y en lo esencial, mediante la combinación de todos esos elementos, es uno de los poquísimos films argentinos que desnudan a la perfección los mecanismos de la tremenda violencia emocional que se ejerce sobre quienes amenazan la normativa heteropatriarcal.
Retrospectiva BK y Basta!
Se llamaba José María Beccaría pero firmaba sus films como BK & Basta! y su música como Mamá Nos Pegaba. Si a alguien intrigan esos seudónimos, debe saber que el grupo que integró para hacer sus primeros cortos en video se llamaba La Puta Que Te Parió. Como dice Pablo Rodríguez Jáuregui, que fue su amigo, colega y promotor, “BK nunca hizo ningún esfuerzo para caerle bien a nadie”. Nació en la localidad de Arequito, Santa Fe, pero concentro su trabajo en Rosario. Fue discípulo del legendario animador experimental Luis Bras y luego se sumó a El Sótano Cartoons, que Rodríguez Jáuregui y Esteban Tolj fundaron en 1996 en el antiguo estudio de Bras sobre la calle San Lorenzo, que era efectivamente un sótano. Ese grupo inicial, que daba cursos y producía con fruición, atrajo a jóvenes entusiastas, como Diego Rolle, recién egresado de la secundaria. Los cuatro, más otros que entraron y salieron, formaron el núcleo más importante de la animación rosarina, que se prolonga hasta la fecha en una escuela de animación, y en multitud de cortos, clips musicales, publicidades, series de TV e intervenciones en largos propios y ajenos. En el grupo, BK era el que venía de otro lado, el que mantenía una zona personal inescrutable, el que tenía algo de marginal y lumpen, el que vivía en pensiones. En el cine sin cámara de Bras descubrió la posibilidad desmitificante, liberadora, que supone hacer cine sin plata, con película velada y un plumín. La revolución digital de los 90 le acercó herramientas un poco más sofisticadas y desde entonces hasta su muerte en 2014, con apenas 42 años, no paró de producir dibujos, historietas, fotografías, música y muchísima animación. Esta retrospectiva reúne 24 cortos y es incompleta, pero representativa. El material abarca veinte años de su producción (1994-2014) y se puede dividir en las categorías siguientes:
LAS PELÍCULAS SIN CÁMARA, dibujadas y coloreadas directamente sobre película descartada de 35mm. En BUSCANDO EL HORIZONTE ilustra por primera vez una canción propia. En VADE RETRO se propuso herejías de diverso tono y llegó a animar de manera inverosímil una miniatura de la Última Cena que habría fatigado al propio Norman McLaren. En CRÉEME dibujó una situación de asalto y captura sobre un negativo de subtítulos (de algún film nunca identificado), cuyos textos arbitrarios reorganizó hasta hacerlos parte del relato. LOS TRAILERS de films inexistentes que le permiten zapar un disparate tras otro alrededor de una idea central, sin necesidad de atarse a una lógica narrativa. Son sus trabajos de humor más libre y salvaje, aunque su apropiación de las reglas del formato es de una precisión diabólica. LAS AVENTURAS DEL OSITO QUE VE ACCIDENTES, siete episodios de humor inexplicable protagonizados por el personaje del título, un oso de traje y expresión enigmática que parece ser la mascota de un joven fornido llamado Mike Ribas. LOS MUSICALES, ejercicios de ilustración y narrativa libres sobre temas propios, como UN CORAZÓN LLENO DE BOLUDECES o LA SEÑORA CALABAZA, y ajenos, como CUANDO TE VAYAS, UN BARQUITO o LO QUE USTED MERECE. En estos últimos aparece un BK más retraído, capaz de evocar climas de belleza y cierta melancolía, aunque sin perder nunca la línea. LAS PELÍCULAS DE TRULALÁ, prolongaciones imprevisibles del universo de García Ferré y otros personajes de la iconografía infantojuvenil, de los que BK se apropiaba con trasnochado desparpajo: TRULALÁ CITY, FUCKIN’ NIGHT y EL CLUB DE LOS CORAZONES SUCIOS. Esta zona de su obra, que actualiza regurgitadas toda clase de consumos culturales lejanos, es el más nítido punto de encuentro creativo ente los cuatro principales integrantes de El Sótano. La retrospectiva se completa con el corto documental YO SOY ESE GRAN COHETE (2020), realizado por Rolle y Rodríguez Jáuregui desde el cariño, la admiración y la experiencia compartida durante tantos años.
Texto y selección: Fernando Martín Peña.
Producción y asesoría: Pablo Rodríguez Jáuregui.
Sábado 14, 18:00
Primero yo (Argentina, 1964) de Fernando Ayala / PIONERES QUEER
Domingo 15 de noviembre, 18:00
Retrospectiva BK & Basta! (Argentina) / PIONERES QUEER
Programación completa en el sitio del Festival https://festivalasterisco.com.ar