Una mujer puede (o no) estar siendo la víctima preferencial de una conspiración para dar a luz al hijo de Satanás. Mientras George A. Romero y sus muertos vivientes modificaban el género desde los márgenes, Polanski lo hacía desde el corazón del cine mainstream, agudizando al máximo los recursos de caracterización y tensión psicológica que ya había demostrado en El cuchillo bajo el agua y en Repulsión. Es poco recordado que el film –un clásico casi instantáneo– fue producido para la Paramount por un especialista del género, el director William Castle (ver El barón Sardónicus), quien siempre se caracterizó por ser mucho más astuto de lo que parecía.
El bebé de Rosemary (Rosemary’s Baby, EUA-1968) de Roman Polanski, c/Mia Farrow, John Cassavetes, Ruth Gordon, Sidney Blackmer, Maurice Evans, Ralph Bellamy. 136’.