Comienza con un dinamismo sorprendente, que se expresa desde un automóvil que escapa en la escena de títulos, y sigue durante una media hora como si se tratara del mejor policial negro que uno jamás haya visto. Luego el relato se vuelve metafísico: al borde de la muerte, un criminal recibe la oportunidad de ser otro, el que hubiera sido si el rico industrial que fue su padre lo hubiese reconocido al nacer. El film se basa en una obra teatral de Eduardo Borrás, que atribuye el destino del hombre a su libre albedrío, liberándolo de la predeterminación de toda fuerza superior: el protagonista elige conscientemente practicar el mal y por lo tanto es culpable. Este postulado invierte los términos de la mayoría de los mejores policiales negros, donde los personajes suelen ser objetos del capricho del destino. Culpable es, en este sentido, una especie de anti-noir. Aquí no hay destino sino autodeterminación y lo más interesante es que detrás de esa facultad no está Dios sino la conciencia humana y el sentido de responsabilidad personal. Los negativos de este film se han perdido. Se exhibe copia hallada por la Filmoteca Buenos Aires.
CULPABLE (Argentina, 1960) de Hugo del Carril, c/Hugo del Carril, Roberto Escalada, Elina Colomer, Myriam de Urquijo, Diana Ingro, María Aurelia Bisutti, Ernesto Bianco, María Esther Duckse, Luis Otero, Carlos Olivieri. 90’.